HITOS EVOLUTIVOS. Meditación profunda y control mental

«Nuestros pensamientos son muy poderosos, debemos aprender a controlarlos, y esto lo lograremos mediante la meditación constante y la reflexión. Podríamos enumerar infinidad de casos, pero por ejemplo, si nosotros somos negativos, si juzgamos a primera vista, si somos egoístas, si somos orgullosos, si hablamos a espaldas de los demás, si sentimos envidia, si no sabemos controlar nuestros impulsos y explotamos con facilidad… todo lo anterior se da porque estamos inconscientemente siendo dominados por nuestra mente y pensamientos».

«La mente deberá estar a nuestro servicio, no nosotros al servicio de ella, los vicios son claramente un ejemplo de ello, el que no puede dominarlos será un títere sin rumbo que está a merced de su mente y sus pensamientos».

«Con la meditación iremos poco a poco erradicando los pensamientos que nos perjudican. Esto se logrará también con concentración, perseverancia, mucha disciplina y por supuesto fuerza de voluntad. Si logramos cambiar nuestros pensamientos para bien, nuestras acciones cambiarán también, la vida la veremos desde otro punto de vista, un nuevo ser nacerá, o mas bien, el ser que siempre hemos sido despertará; nuestra mente estará abierta al conocimiento y al amor, dentro de nuestro mundo material experimentaremos la sincronicidad y la conexión con el todo.

Habremos iniciado felizmente nuestro camino hacia la evolución de la conciencia».

Nacho, Liberación Ahora

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Meditación profunda y control mental

Introducción

Estimados lectores, se nos dice que todos nosotros somos responsables del mundo que tenemos; pues esto depende, ya que cada uno de nosotros aterrizamos en un mundo ya creado previamente, increíblemente complejo, de variedad infinita de formas, y con fuerzas positivas y negativas existentes. Por lo tanto, yo diría, que mas allá de ser responsables del mundo que tenemos, más bien con nuestras acciones, encaminadas ya sea a la polaridad negativa o positiva, haremos nuestra contribución a este mundo que ya existe.

Pero esto resulta obvio ya que dicho mundo se presenta con reglas muy bien establecidas y que tienen que ser respetadas, podremos seguirlas obrando bien o mal, pero al final siempre tendremos que comer, dormir, relacionarnos con los demás, crecer con influencias de otros, estar expuestos a tentaciones, padecer enfermedades y dolor, etc. etc… Al ser seres encarnados nos encontramos en una especie de laberinto donde no podemos volar ni atravesar paredes, nos encontramos en una constante toma de decisiones, donde cada una de ellas implica un avance o un retroceso, dejando huella a nuestro paso, pero al final todos tendremos que completar el ciclo.

Ese camino o laberinto es un juego maravillosamente complejo, y su razón de ser es que cada uno de nosotros pueda evolucionar en conciencia. El juego de la vida es tan perfecto que parece que no es un juego, nadie nos dice que estamos en él, parece real, y hace que sigamos sus reglas al pie de la letra, para que al final nos convirtamos en esclavos de un sistema materialista.

Entonces, al seguir las reglas del sistema (ya orientándonos al lado positivo), probablemente nos convertiremos en gente de bien, que logró sus objetivos en cuanto a obtención de un patrimonio y bienes materiales que aseguran de alguna manera nuestro futuro y el de nuestros seres queridos.

Esto último es a lo que la mayoría de la gente quiere llegar o aspira, pero este único camino no nos llevará a una evolución de conciencia, al contrario, simplemente significa que nos dejamos engañar y caímos en las redes del sistema, fuimos sus esclavos toda la vida sin darnos cuenta. Y al final, la prueba divina de evolución en conciencia, que es la que realmente importa, no ha sido superada.

A lo que quiero llegar con lo anterior, es que cada uno de nosotros, para poder evolucionar, deberá seguir un camino paralelo al camino materialista previamente diseñado; este camino es el espiritual, y no implica para nada dejar las roles materialistas que tenemos asignados, ya que como mencioné anteriormente no podremos escapar de ellos y debemos hacerlos con responsabilidad.

A diferencia de nuestro ejemplo del laberinto, el camino espiritual no tiene fronteras ni límites, y es el camino más importante a seguir para poder experimentar el amor,  la compasión y el servicio a los demás, esto nos hará evolucionar y sentirnos cada vez más cerca del creador.

Es importante mencionar que aunque vivimos bajo un sistema materialista opresor lleno de sufrimiento e injusticia, nunca perdamos de vista que también tiene su lado bueno, sano y hermoso, por ello no nos enfoquemos en odiarlo, si no en entenderlo tal y como es, ya que es parte de la creación misma y una gran prueba a superar; y también tratar de entender que este mundo no va a cambiar, ya que la polaridad negativa siempre estará en estas bajas densidades para nuestra propia evolución.

Debemos tratar siempre de esforzarnos en interactuar de manera correcta con el mundo material para mantener mente y cuerpos sanos y conectarnos con la sincronía del todo. No debemos preocupémonos por combatir la maldad, si no por brillar desde nuestro interior proyectando luz y amor a nuestros hermanos, y sin necesidad de nada a cambio o reconocimientos, tarde o temprano esa energía convertida en amor retornará a nosotros.

Un paso básico en nuestra evolución es dominar y controlar nuestros pensamientos, para ello necesitaremos  mucha fuerza de voluntad, y herramientas muy poderosas como la meditación y la reflexión que deberán formar parte de nuestra vida diaria.

Recordemos que el dueño del juego nos creó con “super poderes”, todos sin excepción tenemos un poder creador infinito en nuestro interior que emana desde la unidad; el problema radica en que no lo sabemos. Una de las grandes pruebas en este mundo material es, que cada uno en su camino individual de evolución, los vaya descubriendo.

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Nuestros pensamientos y acciones

Nuestras acciones son nuestra manera de actuar y de comportarnos, son la manera del cómo nos proyectamos día con día en este mundo material. Recordando la ley universal de causa y efecto comprobaremos que todo acto realizado es consecuencia de una serie de pensamientos; por lo tanto, pensamientos desordenados, sin armonía, negativos, violentos, traerán como consecuencia acciones o actos de la misma índole; y por el otro lado pensamientos lógicos, con armonía, basados en el amor, en el bien común y en el servicio a los demás, tendrán como consecuencia también acciones de la misma índole.

Resulta ilógico pensar en obtener armonía, paz y amor como consecuencia a pensamientos basados en el odio y la violencia, y por el otro lado es igualmente ilógico pensar en obtener acciones totalmente negativas basadas en pensamientos de armonía y amor; esto nunca será posible.

Claro está que estamos hablando de pensamientos con intención verdadera, ya que pudieran existir acciones “supuestamente bondadosas”, pero con un trasfondo o pensamientos contrarios (en este caso negativos), esto para el beneficio y ambición del que los lleva a cabo. Esta incongruencia en acciones y pensamientos, muy común en nuestros tiempos, genera un bloqueo en nuestra propia evolución, y un desgaste interno que puede llegar a afectar nuestro cuerpo físico.

Los pensamientos son de gran importancia en nuestra vida diaria y en nuestra evolución, ya que nuestra realidad y nuestros sentimientos están basados en ellos. Los pensamientos mueven energías dentro de un universo inteligente interconectado con el todo; ya que nosotros mismos estamos vibrando a una frecuencia y somos energía, ellos afectan nuestro entorno, y a las personas que nos rodean, por lo tanto podremos afirmar que somos lo que pensamos.

La mayoría de las personas no controlan, o no saben controlar sus pensamientos. Si les preguntásemos a un grupo de ellos seguramente nos contestarían que sí pueden, pero el controlar nuestros pensamientos significa saber dominar nuestra mente y nuestras emociones, y esto último es lo más difícil a lo que un ser humano se pueda enfrentar, es una prueba durísima que únicamente se puede lograr con lo que comúnmente llamamos fuerza de voluntad.

La fuerza de voluntad

La fuerza de voluntad es la capacidad individual de poder llegar a un objetivo o cumplir una meta determinada (esto mediante una total disciplina y perseverancia), y que de manera inherente nos llevará a pasar por muchos sacrificios. El que tiene verdadera fuerza de voluntad vencerá cualquier obstáculo no importando los sacrificios que tenga que pasar para lograrlo.

Pasando al plano espiritual, la fuerza de voluntad es básica; debemos ganar en ella día con día para poder avanzar en nuestro camino individual de evolución. El poder llegar a controlar nuestra mente, nuestros pensamientos, nuestras emociones y por consecuencia nuestras acciones, es un camino que solamente cada uno de nosotros deberá recorrer, nadie puede, ni lo va a realizar por nosotros.

Recordemos que el hombre que no pueda controlar sus emociones no podrá controlar nada en su vida.

 

La meditación

Muchas personas tienen la limitada creencia de que la meditación es algo que realizan únicamente personas devotas creyentes de alguna religión en particular, ya sean monjes tibetanos, lamas, budistas, islámicos, etc., y que dichos actos se realizan principalmente en monasterios apartados, en contacto directo con la naturaleza y muy lejos de la civilización.

Esta creencia, podríamos decir, que es parcialmente verdadera, ya que por un lado sí es cierto que esta clase de personas practica la meditación diariamente y que esta es parte fundamental en sus vidas. Pero por el otro lado, ellos, de ninguna manera, son los únicos que la pueden practicar, todos sin excepción podremos meditar si nos lo proponemos. De hecho estos devotos practicantes son vistos generalmente como personas extrañas, como seres separados o ajenos de lo que supuestamente es la realidad materialista en que vivimos.

Las personas que practican este tipo de meditación generalmente han alcanzado un nivel de conciencia superior, pueden controlar su mente, pensamientos y cuerpo físico, al grado que una persona común no podría, y muchos de ellos han dedicado su vida al servicio de los demás, y a poder llegar realmente a conocerse a sí mismos.

Estos niveles de meditación tan elevados muchas veces requieren que sus practicantes se aparten de la civilización en busca de mayor tranquilidad y equilibrio de energías.  Pero esto es simplemente un nivel de meditación, que ciertamente es muy elevado, pero todas estas personas que lo practican tuvieron que haber pasado por niveles inferiores, y mucho sacrificio, para así poder lograr controlar sus mentes y cuerpos como lo hacen. Es imposible poder volar sin antes haber caminado.

El común de la gente no cree que la meditación la pueda hacer cualquier persona común y corriente, y esto es un grave error, cualquiera que realmente se lo proponga llegará, en su momento, a los mismos niveles mencionados.

La meditación la podríamos definir como un canal que nos conecta con la unidad, con nuestro YO interno, con la luz y el amor, con la energía consciente del universo, y esto se puede lograr únicamente con la mente totalmente en silencio.

¿A qué me refiero con la mente en silencio, o en blanco, o en quietud? Significa una mente despojada de todo aquello que no necesitamos y nos perturba, como prejuicios, malos pensamientos, ambición, ego, etc., y todo aquel veneno que  absorbemos como esponjas de manera inconsciente en nuestro caminar por el mundo material.

También es una creencia limitada que la meditación únicamente se tiene que realizar en lugares apartados y silenciosos. Estos ambientes ciertamente ayudan y dependerá mucho del nivel de meditación, pero para nosotros, gente común pero despierta, se pueden ejercitar la meditaciones durante  nuestras actividades cotidianas. Podremos comenzar en la práctica de la meditación tratando de controlar nuestros pensamientos, es decir, nuestra mente, esto lo explicaremos en el siguiente segmento.

Control de la mente y pensamientos

Alguna vez nos hemos preguntado ¿quiénes somos realmente?, ¿cuáles son nuestros principales defectos y virtudes?, ¿podríamos escribir en un papel nuestras más profundas deficiencias, defectos y pecados cometidos? Para la mayoría de las personas resulta muy difícil describirse realmente cómo son con todos sus defectos, y esto se da principalmente porque no han buscado respuestas en su interior, si no en lo exterior y material. Esto implica no conocerse a sí mismos; sería algo parecido como caminar a ciegas hacia un precipicio y no escuchar las voces que nos advierten del peligro.

El primer paso fundamental para la evolución individual de nuestra conciencia es el tener la intención de cambiar y de ser mejores. Para las personas que no lo sientan, por ahora, no les servirán estas líneas en absoluto, y digo por ahora, porque ya les llegará el momento a ellos también, ya que todos evolucionaremos.

El segundo paso es conocernos a nosotros mismos, es decir, aceptar y reconocer plenamente cuales son nuestros defectos y virtudes; y esta deberá ser una búsqueda individual en nuestro interior, y deberá ser totalmente honesta. El trabajo primordial que debe hacer todo ser que quiera evolucionar, es el de corregir sus errores; y deberá empezar por los mas sencillos. Para ello la meditación y la reflexión son grandes herramientas para lograr su cometido; pero eso sí, si no existe la fuerza de voluntad necesaria esto nunca podrá ser logrado.

Empecemos por lo más simple, no hay prisa, el sólo hecho de sentir la necesidad de un cambio para bien desde nuestro interior es un paso enorme, yo diría, sin titubear, que es el paso mas importante.

Recuerden que debemos ganar en fuerza de voluntad!!!, para ello debemos empezar por cambiar nuestros malos hábitos, y debemos hacerlo en situaciones que nos cuesten trabajo o un sacrificio; por ejemplo si tenemos algún vicio, ya sea alcohol, cigarro, juego, etc., tratemos de erradicarlo de inmediato. Esto requerirá de un sacrificio muy grande, pero cada día que avancemos en el cambio, es decir, ni un cigarro más, ni una copa más, ni un juego más, estaremos ganando en fuerza de voluntad y salud.

Si a nosotros nos cuesta trabajo hacer las cosas con responsabilidad y bien hechas, por ejemplo en el trabajo, hagamos un esfuerzo en hacerlas siempre de la manera correcta, no a medias, no importando si terceros se dan cuenta o no; hagámoslo por nosotros mismos, por sentir la satisfacción de que el trabajo quedó bien hecho, por saber que no tendrá ninguna afectación a terceros; al lograrlo dormiremos mejor, tendremos paz interior ganando también en fuerza de voluntad.

Nuestros pensamientos son muy poderosos, debemos aprender a controlarlos, y esto lo lograremos mediante la meditación constante y la reflexión. Podríamos enumerar infinidad de casos, pero por ejemplo, si nosotros somos negativos, si juzgamos a primera vista, si somos egoístas, si somos orgullosos, si hablamos a espaldas de los demás, si sentimos envidia, si no sabemos controlar nuestros impulsos y explotamos con facilidad… todo lo anterior se da porque estamos inconscientemente siendo dominados por nuestra mente y pensamientos. Estos pensamientos son muy comunes, forman parte de nuestra vida diaria y llegan como por arte de magia, y que todos (consciente e inconscientemente) en alguna ocasión los hemos experimentado.

La clave para eliminarlos es hacer una pausa, respirar profundo , hacerlos conscientes y tratar a toda costa de bloquearlos y pensar en lo opuesto.  Lo anterior es una forma de meditación y reflexión disponible para cualquiera, esa pausa, que aunque muy pequeña, es la que nos conecta directamente con nuestra conciencia, con nuestro yo interno; por lo tanto, si ya tenemos bien identificados cuáles son nuestros defectos, entonces con esta sencilla práctica, trataremos de no cometerlos, y esto en cada una de nuestras actividades y relaciones de nuestra vida diaria.

Pareciera como si el control de la mente fuera sencillo, pero como mencioné anteriormente, es la prueba más difícil a superar que jamás ha tendido el ser humano. El que diga que es fácil, que intente focalizar la mente en un objeto o una frase y mantenerla allí, sin que ningún pensamiento lo perturbe durante unos pocos minutos. Rápidamente la frase o el objeto se desvanecen sin siquiera darnos cuenta, y en este ejemplo sencillo parecería que nuestra mente  jugara y se riera de nosotros.

La mente deberá estar a nuestro servicio, no nosotros al servicio de ella, los vicios son claramente un ejemplo de ello, el que no puede dominarlos será un títere sin rumbo que está a merced de su mente y sus pensamientos.

Entonces en resumen, con la fuerza de voluntad cambiaremos nuestros malos hábitos. Empecemos por el mas sencillo, uno a uno, no tratemos de erradicarlos todos al mismo tiempo ya que podríamos fracasar; sean pacientes disciplinados y lograrán su propósito.

Con la meditación iremos poco a poco erradicando los pensamientos que nos perjudican, esto se logrará también con concentración, perseverancia, mucha disciplina y por supuesto fuerza de voluntad. Si logramos cambiar nuestros pensamientos para bien, nuestras acciones cambiarán también, la vida la veremos desde otro punto de vista, un nuevo ser nacerá, o más bien, el ser que siempre hemos sido despertará; nuestra mente estará abierta al conocimiento y al amor, dentro de nuestro mundo material experimentaremos la sincronicidad y la conexión con el todo.

Habremos iniciado felizmente nuestro camino hacia la evolución de la conciencia.

No hagas a los demás lo que no te gusta que te hagan

O también conocida como, “Trata a los demás como quisieras que te traten”, frase de una profundidad enorme, conocida por la mayoría, ¿pero realmente la aplicamos en nuestros actos cotidianos?, o para no ser tan drásticos, ¿en qué porcentaje la usamos en el día con día?, yo creo que la usamos muy poco o casi nada.

Volviendo a la meditación y control de nuestros pensamientos,  podremos enfocarnos en esta frase y tratar de aplicarla todos los días a partir de hoy, ¿porqué esperar?, si esto nos beneficiará a nosotros en evolución y beneficiará a todo aquel que trate y tenga relación con nosotros.

Empecemos por lo simple, si somos agresivos en el tráfico y alguien nos cierra el paso, hagamos esa pausa mágica, y cedamos el paso amablemente; si nuestra reacción con cierta persona es de pocos amigos, hagamos la pausa y brindemos una sonrisa o un gesto amable; si estamos muy ocupados y con un alto grado de estrés, por ejemplo en nuestro trabajo, y alguien nos pregunta algo interrumpiéndonos, hagamos la pausa, dejemos lo que estamos haciendo, y prestemos de una manera cordial atención a dicha persona, no importando quien sea, y escuchemos lo que quiere decirnos, mostremos siempre interés y respeto por los demás.

Esto estimados lectores es control de los pensamientos mediante meditación; es sumamente difícil pero no imposible, lo que se necesita es intención verdadera y fuerza de voluntad, y la única manera de evolucionar es llevarlo a la práctica e ir superando las grandes pruebas de nuestra vida diaria. Las pruebas se repetirán una y otra vez, podremos retroceder a veces, pero con la fuerza de voluntad retomaremos el camino.

Aplicando estos simples ejercicios en nuestra vida diaria con disciplina y perseverancia, poco a poco nos iremos despojando de lo que no necesitamos, así como de prejuicios y trabas mentales programadas inicialmente por el sistema. Al cambiar nuestra actitud hacia el servicio a los demás no necesitaremos más alimentar nuestro EGO con reconocimientos, aceptación social o bienes materiales; tendremos lo que realmente necesitemos, podremos darnos gustos ¿porqué no?, y también sabremos dar incondicionalmente al que lo necesita.

El poder llegar a dominar nuestra mente es el primer gran paso; ya después podremos pensar en los siguientes niveles de meditación, antes no.

Un abrazo grande desde el corazón.

Su amigo Nacho

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